25 DE MAYO: GRAN FIESTA PATRIA POPULAR

[25 de mayo, 2011] Entramos a la Plaza de Mayo por Defensa y Alsina, justo en esa esquina estaban sirviendo chocolate caliente y regalando alfajores, los tomamos y fuimos a ver de qué se trataba la fiesta. Fuimos lo más adelante posible hasta toparnos con un vallado negro, del otro lado pero pegando la vuelta estaba el recientemente inaugurado por la presidenta Museo del Bicentenario, quisimos saber que contenía la nueva instalación y lo primero que apareció fue un inmenso calor, la gente allí dentro estaba de remera, y algunos que no se habían querido sacar la campera, se encontraban con un fuego que salía provenientes de su interior, las paredes de piedra claritas eran lo que había quedado en aquel subsuelo trasero a la Plaza de Mayo, una de las primeras cosas que se muestra es un escritorio que perteneció a Sarmiento, en otro cubículo custodiado por los granadero estaba un sillón de funda roja usado por Cristina y Néstor. Volvimos a la Plaza y había cumbia, todavía la gente estaba llegando y partimos para volver, La Plaza es un amor al que siempre se vuelve

SOI CUMBIO EN EL ABASTO

{domingo 17 de abril, 2011} Fuimos al pasaje Carlos Gardel, una calle peatonal que sale como una alfombra roja del shopping Abasto, a ver al aire libre la película de la directora Andrea Yannino Soi Cumbio sobre la flogger más famosa de Argentina, Cumbio. Lo primero que me llamó la atención fue que Agustina Vivero tenga una computadora vieja, de esos monitores blanco cremita que se acomoda como si fuese un telescopio, a gusto y piacere del que la usa. La dueña del fotolog dice frente a cámara, recostada en la tranquilidad de su pieza, "mi familia no me entiende" y unos minutos anteriores la madre decía con la mandíbula un poco salida hacia afuera "y por qué la llamaron cumbio si es una nena, eso es lo que no comprendo", el padre se muestra con sentido del humor y cambia de sus brazos una niña por otra, aduciendo que una no la quería, ¿serán sobrinas de la muchacha de ojos tristes?, como la bautizaron en la tele. Antes de comenzar el film, Andrea dice "estamos esperando a Agustina...una persona que es referente del barrio del Abasto", pero vamos a mitad de la película y ella no aparece, está en la pantalla, adentro, como todos los famosos, que son tan irreales que únicamente los podemos ubicar metidos en una caja. Me sorprende al ver que Cumbio, la que salía en tele cada dos por tres, se paseaba tranquila por las escalinatas del abasto, donde se juntaban todos los de su condición flequillos agazapados a la frente, teñidos, aros en las bocas; Vivero dice ser la que hizo conocida a esta especie en un principio rara llamada floggers, en eso una periodista de Clarín llama, Agustina contesta en alta voz, quieren hacerle una nota sobre la opresión de los jóvenes, ella dice no con la cabeza y luego lo expresa cuando la reportera termina de hablar, "no tengo nada que hablar de eso".

3° FESTIVAL DE FOLKLORE EN LA PLATA

[domingo 10 de abril, 2011] Dúo Orellana Lucca para empezar, buena chacarera con batería y fuerza, despojada del corito nochero que a veces resulta tan molesto, una voz limpia, sin floreo. El escenario en que tocaban era el alternativo, como si fuera el espacio de un living grande, lleno de pasto amarillo en el piso para amenizar el sentarse sin almohadones ni sillas o reposeras. Mucho mate dando vuelta, bailarines fervorosos. El sol cubría cada espacio de verde, el bosque estaba iluminado. Subía un calor del pecho, la gente se paraba para aplaudir a Eva Ayllon, la peruana que encendía fuego en la tribuna argentina. Cuando el estribillo rezaba  que le dijo a su papá Yo quiero cantar unas niñas subieron a escena y comenzaron a mover sus caderas parecido al baile del vientre, con una mezcla de reggaeton  con la que inflaban su delantera y volvían a desinflar, Eva estaba un poco confundida, no sabía que iban a subir y ya les había dicho que se fueran en la canción anterior, en eso el guardia de seguridad intentó sacarlas y el corista negro de rastas hizo canción un deseo Dejalás, Dejalás. El siguiente tema fue decir Casera muchas veces, se trataba del tema El tamalito con el cual terminó su show. Salimos del Anfiteatro y nos esperaba Juana Fe de Chile, pensé que una mujer cantaba y su voz era muy parecida al timbre de una auténtica hembra, en la tarima del escenario alternativo bailaba un hombre de barba y gorrita, su tono latino se confundía con su imágen, cantó temas a favor de Víctor Jara, de los vendedores ambulantes -que representó en un recitado de las estrofas típicas que entonan en los trenes o colectivos- y de la marihuana. Apenas terminó el ritmo ese Raly ya aparecía en escena en otro  escenario, que era el que no estaba cercado por ninguna columna y en el que cabían miles y miles de personas, al final de todo se veía bien la pantalla, si te acercabas solo se divisaban las cabezas de los que estaban adelante tuyo, un bailarín hacía de las suyas con distintas compañeras, la madre, la hermana -que poco lo podía seguir-, y la novia, bailarina profesional como él. Barrionuevo entonó De nuevo estoy devuelta, después de larga ausencia... más tarde le cantó al che Aprendimos a quererte y más tarde "somos", siguieron los Coplanacu que no se olvidaron de los clásicos.

LAS D´ ENFRENTE CON CHINA ZORRILLA Y ELENCO

[30 de marzo de 2011, Espacio Cultural Carlos Gardel] Teatro leído, una sillas para los actores y una mesita para China, nada más, sin escenografía y con el libreto en mano de cada uno. Con ese panorama uno piensa que va a ver una obra de menor categoría, sin embargo todo lo contrario, una de los mejores espectáculos de los que tengo memoria. China es la madre que consiente a su hijo varón, el preferido, el cual para sus ojos siempre está enfermo y adolece de algo grave. La historia se centra en 1910 donde tener un almacén era signo de prosperidad pero no resultaba bien visto, el marido de China en la ficción era dueño de uno de estos negocios, y el más escéptico a copiar lo que hacían las vecina de enfrente. Por el contrario las hijas de este matrimonio vivían pendientes, si una de allá se casaba una de ellas tenía que contraer matrimonio, aunque más no fuera con la mano derecha del dueño del almacén, un agarrado que contaba cada peso que salía de su bolsillo. Si las otras se iban caminando a Luján, ellas lo hacían también. Si de luna de miel se iban a Montevideo, las hijas de China la copiaban y al menos llegaban hasta Mar del Plata. Una obra muy graciosa, que además tiene una historia de amor que se forma, otra que se rompe y una familia que su vida pasa por lo que hagan las de enfrente. 

ACTO POR LA MEMORIA

[24 de marzo 2011] Fui por Reconquista, mi gran truco para llegar en la plaza considerablemente adelante. Cerca del escenario, tapada por algunas cabezas, alcanzaba a ver los locutores que decían 30.000 desaparecidos...presentes, ahora...y siempre. Escuché algunas adhesiones sorpresa para mi, como música esperanza, un grupo conformado por jujeños, bolivianos y chilenos. Rápidamente comenzó el choque urbano, una banda de percusión que daba toda la idea de haber nacido en la ciudad, por instrumentos como caños, escaleras, suelas de zapato y megáfonos y además por su nombre.

THIAGO PETHIT Y DOLORES SOLÁ EN MÚSICAS DEL SUR II

[domingo 13 de marzo 2011] Anoche vivimos un momento especial, con humor y teatralizaciones, con vino y agua, con una mujer y un hombre. Arrancó cantando el paulista elogiado por Caetano, Thiago Pethit y lo primero que sorprendió fue su excelente castellano, precisamente con el "muchas gracias" al terminar un tema lo demostró. Con 27 años veía por primera vez al público de Buenos Aires, nunca había tocado para nosotros, pero vino a la capital en el 2007 a estudiar música, después de haber hecho una intensa carrera en la actuación, y esto último se le notaba por la manera que encaraba sus canciones, con un toque de personaje, bailaba y movía sus manos como un director de orquesta, dijo que siempre quiso decir este para luego decir lo que tenga que decir, y después nos cargó a los porteños con el viste. Dolores, la voz exquisita de la Chicana, siguió en ese tono festivo y lo primero que dijo es no saben cuanto lamento que no tengan un vaso para brindar conmigo y se reía abiertamente, luego habló de los cuernos y comentó nadie muere mocho, es más todo lo que decía era en broma, siguió con que no encontraba nada más triste que un payaso, y del público contestaron rápidamente, dos payasos. Ella dijo, sabés que no, por que por lo menos se hacen compañía, y eso era los que nos pasaba, nos acompañábamos uno a otro, sorprendiéndonos de lo que podía salir de nuestro corazón.

CARMINA BURANA EN EL PARQUE CENTENARIO

[26 de febrero, 2011] Los colados somos unos pocos, que tenemos que aguantarnos a los de atrás quejarse, pero llegamos a la tercera fila. Lo primero que aparece son hombres y mujeres con polleras que terminaban como copas de árboles redondos. Las mismas eran bordó, violetas, azules petróleo. De arriba las bellas damas lucían una mallas transparentes de bailarinas. In taberna fue una de las mejores escenas, donde los caballeros tenías unos gorros de tela de media, algo lúgubre que incumbe a esos sitios donde se va a tomar, y una pareja de baile relata una especie de seducción sucia, donde la chica hace de mala, digo por sus movimientos rígidos, hasta encontrarse con el hombre y penetrarse.

JAIME TORRES EN EL HAROLDO CONTI

[21 de enero 2011] Llegamos reflexionando que en el recital pasado en el mismo lugar donde estábamos no había ido gente y pensamos los porqués, dijimos, un lugar que fue centro de detención militar asociado ahora con recitales y algarabía, tal vez la gente no se sentía cómoda. Efectivamente ese tema era motivo de largas discusiones, se debía hacer un centro cultural o tal vez solamente un museo donde recordar y pensar seriamente lo sucedido. Pero ahora era otro el escenario, faltaban cuarenta minutos para entrar y ya había una cola larguísima, nuestra teoría -de que no iba tanta gente por la impresión que le causaba estar en un lugar así- flaqueaba. Entramos y Jaime miró hondamente a algunas personas de las primeras filas, comenzó con una melodía tranquila en la que intervenía el charango apenas unas notas. En mitad del recital nombró a algunos de los presenten que estaban, entre ellos, la mujer de Jaime Dávalos, y el Tata Cedron, que se presentaría el viernes que viene en el mismo lugar. Cada integrante del grupo mostró sus virtudes artísticas tocando el instrumento que lo identificaba, y la del acordeón para sorpresa de muchos sacó una vocecita finita y dulce que encantó hasta el mismo Jaime Torres que dijo que era la primera vez que la escuchaba cantar y llegó a decir muy lindo por lo bajo mientras empezaba la siguiente canción.

FERIA NAVIDEÑA DE DESARROLLO SOCIAL

El taxi nos dejó ahí, pero eran otras calles de las que decía la programación. Nos entregaron un folleto y entramos al patio. Pensé que regalaban bebidas, porque todos salían con un vaso de un líquido amarronado que creía que era jugo de uva, después me enteré que era cerveza y se compraba, salvo los músicos que eran convidados por los bailarines a tomar un traguito más. Otra de las cosas que se vendía bien era un roll con queso y tomate adentro. El primer salón que entramos tenía música y juguetes, compramos una remerita para una niña de 7 que era lo mismo el talle 8 que el 6, encontramos un aparato que movía pelotitas y cuadraditos de colores por un alambre que se enroscaba, iba y venía, subía y bajaba. La guitarra de un rasta sonaba, mientras que los tambores también se escuchaban. Fue curioso que pongan a los chicos con la música, esa era la filosofía del salón. Después salimos y volvimos a entrar en el espacio de la ropa y las artesanías. Luego nos fuimos para la comida donde daban a degustar todo tipo de cosas, saladas y dulces, una mezcolanza en el estómago, puré de garbanzos, alfajor de chocolate. No quise volver con las manos vacías y pedí un jugo de melón, que también salían mucho en el konex. Me daba nervios escuchar a un grupo que solía escuchar en mi primera juventud y no tener nada para tomar, me sentía como los que agarran los cigarrillos nada más que para hacer que pase el tiempo. Cuando empezó a sonar Pacha Runa me dí cuenta que todos estaban bailando, haciendo el trensito andino o saltando, algunos agarraban los cochesitos de sus bebés y los giraban generando coreografías naturales. Nada había cambiado de cuando los solía escuchar, tocaron Picarita, y se fueron con un enganchado de Hoy estoy aquí y otros temas conocidos del norte.

FESTIVAL POR LOS DERECHOS HUMANOS

[ 12 de diciembre, 2010] Había puesto en el facebook que los recitales empezaban a las 21 guiada por una información que daban en la página web de un canal de aire, pero cuando llegué ya estaba León Gieco en el escenario, cantó Pensar en nada que después volvería a interpretar junto a Santaolalla, me fui a un locutorio para cambiar el dato erróneo que figuraba en mi página, pregunté en un kioskero donde podía conseguir internet, y me dijo "hoy domingo, en ningún lado" hice un paso hacia la izquierda y en el kiosko de al lado tenían máquinas disponibles, como unas veinte personas me habían preguntado en el blog si se suspendía por lluvia, el viernes se había pasado para el domingo, pero el domingo aunque un  poco feo el tiempo el recital se hacía igual, el viernes al principio me habían dicho que se hacía, así que no dudé en ponerlo, o sea que todos manejábamos informaciones incorrectas, yo con que se hace o no se hace, con que empieza a la noche o al mediodía como bien puse en el blog, el kioskero con internet, lo único que era real era lo que pasaba en el enorme escenario que habían montado a los pies de la rosada. Compré una galletitas Rumba y me fui a convidar, tomamos unos mates y me adelanté para ver más de cerca la cosa. Fui a parar justo atrás de una heladerita de telgopor, el vendedor y un amigo se estaban tomando todas las latitas de cervezas que tenían para vender, me ofreció agua y me preguntó si cada uno de los cantantes que pasaban eran Argentinos, me dijo que se iba a tener que quedar hasta el final porque con semejante heladera no iba a poder ir a ningún lado, estábamos rodeados por millares de personas, eso era cierto. Kevin Johansen cantó Mc guevara o che donals y explicó que el Che Guevara al quedar reducido a remeras con su foto, no era más que otro símbolo del capitalismo, también cantó Logo un tema mitad en portugués y mitad en castellano, que sentencia que ya todo tiene logo: recital, festival, y muchas cosas más, es una lista enumerativa. Después pasó el grupo de rock uruguayo No te va a gustar que cantó temas con letras positivas, como la que dice...mañana va a ser un gran día te lo digo yo...y temas que parecen catárticos que dicen...que saltes al vacío y que no vuelvas nunca...como si sacara un dolor muy grande que le causa una persona y lo lanzara a volar al cielo de la plaza. El vendedor de latitas de cervezas me dejó al cuidado de su puesto, y yo no sabía que hacer porque me llamaban para encontrarme con otras personas que estaban en el café victoria, mientras le vendía gaseosas al flaco trataba de dejarle el puesto a cargo a otra persona que no quería asumir esa responsabilidad, justo llegó el dueño del puesto y le dije "por fin" le dí la plata de lo que había vendido y me fui a buscar a mi gente del café Victoria.

PETECO CARABAJAL EN EL HAROLDO CONTI

[8 y 9 de diciembre, 2010] Llegué casi una hora después, en la entrada me pidieron el juguete para el Garrahan y me dijeron que si no lo había traído lo podía comprar, que todavía el recital no empezaba, cuando entré a la sala vi sólo completas la fila  uno y dos, todo lo demás era gente despareja que ocupaba asientos muy espaciados entre sí, o sea, en algún punto había fallado la convocatoria, que un artista de la talla de Peteco estuviera casi a solas con su grupo era poco creible, es decir, si alguien te lo cuenta no te fías de lo que te dice, pero condecía con lo que él venía a presentar, que era un ensayo, y en varias oportunidades de la noche se encargó de aclararlo, en realidad estaba preparándose para un concierto donde grabaría en vivo su nuevo disco El viajero. Preguntó: "Van a venir a Rosario?" y casi sin esperar respuesta dijo, "sé que muchos de ustedes van a estar ahí". Repasó temas que compuso en los 80´, cantó Corazón delator  de Cerati y Vamos a andar de Silvio Rodriguez. Demi, que parece su sobrino pero descubrí que era su hermano, uno de los menores, se relamió cuando hablaron de su batería, que le preguntaron desde el público si había sido nueva. También estaba un músico de la banda que estaba aprendiendo todos los temas para entrar definitivamente en el mundo de los Carabajal. Y Homero, de la familia santiagueña del folklore, que escribió una canción la cual tocaron pero Peteco preguntó que le pasaría tan grave para haber escrito eso, lo mismo dijo con temas de él. Las bailarinas no se demoraron en salir a los costados a interpretar con movimientos eufóricos o más lentos la música de la tierra donde la siesta es lo primero. Peteco contó que hace poco habían ido a China, invitados para actuar en un stand de un congreso que se hacía por allí, de ahí salió la chacarera de Shangai, que las chicas no sabían como moverse para seguirle el ritmo y Peteco sugierió que se guiaran por un estilo de taichi o algo así.

COCINAS DEL BICENTENARIO EN EL KONEX

(Del 3 al 5 de diciembre, 2010) Nos bajamos del colectivo apenas asomó la Plaza Almagro, al atravesarla yendo en diagonal recordamos cada uno las historias propias transcurridas en ese espacio entre verde y de cemento que siempre es concurrido por toda clase de gente y animales y repleto de reposeras en verano. Fuimos casi a ciegas por la calle Sarmiento, nunca había ido al Konex, no sabía bien donde quedaba y sólo divisaba siempre al pasar la escalera esa gigante que incrustaron en la entrada, que parece el ascenso a una nave espacial. Cuando llegamos el patio estaba casi vacío y hacía calor, Martiniano enfundado en su traje de cocinero hablaba con alguna gente, como si hubiese terminado de dar una charla, a los costados de la explanada se refugiaban del sol una pocas personas que sostenían con sus manos licuados de melón, preguntamos donde los vendían y cuanto costaban, al ratito estábamos también con nuestros jugos que era realmente la sensación ese día y a esa hora. En una sala de arriba escuchamos un mexicano que hablaba hasta por los codos y que cuando terminó respiró y contó una anecdota que fue oportuna, un amigo suyo lo catalogaba de Fichera. Y es que así se les decía a las chicas que conversaban con los hombres que iban a tomar alcohol a los boliches, cuanto más frases y párrafos en la noche les dijeran mejor era, pues estos compraban más fichas para seguir tomando. Así es que consideraban importante el valor de lo dicho, como nuestro amigo que llenó nuestros oídos de todo tipo de reflexiones y salvando las distancias era una auténtica fichera, para la risa de todos los que estábamos ahí. Comimos, ya que nos dieron a degustar lo que fueron cocinando sus asistentes, primero fue unos daditos de pollo con una salsa apenas picante y luego unos tacos, bajamos y degustamos cuanto había en los puestos, compramos unos vinos y nos fuimos pensando en volver como los borrachos de los bares mexicanos.

LA NOCHE DE LOS MUSEOS

[13 de noviembre, 2010] La noche de los museos tuvo de todo, en mi caso empezó con media hora de cola para entrar al Malba, y cuando llegué nos fuimos faltando una cuadra de esas que no terminan. Continuó en el Metropolitano, en unos sillones bajo los árboles perfumados. Con tango y música clásica de fondo que ocurría en un salón previo a las obras. Siguió en el Centro Cultural Coreano, donde nos dieron nuestros nombres en su idioma y vimos un video de danza de allá, en el que los bailarines tenían unos paños de colores que movían con eterna delicadeza. Después vino el Fernández, tras unos vidrios había artesanías y en el patio unos tangos un tanto tristes. Y para cerrar terminamos en la Casa de Cultura del Fondo de las Artes, que quedaba luego de unas sigzagueantes callesitas y vimos lo mejor de la noche, Los duendes de la salamanca en vivo, las trompetas derribaron los asientos, la voz dulce de la cantante hizo erisar al más tieso y el charango abrió el vuelo hacia tierras lejanas que empezaba en el punto donde estábamos, que ya nunca volvería a ser el mismo.